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MIGUEL ÁNGEL DOMÍNGUEZ CLEMENTE (2023, [Tesis de maestría])
Con su marca en tierra reservada para la explotación de un efectivo aparato de transporte, los caminos de hierro han consolidado su papel, desde el siglo antepasado, dentro de los modelos de movilidad diseñados para reducir los tiempos de traslado acumulados en la fisonomía de un espacio geográfico. Por supuesto, no se debe pasar por alto que parte de su origen —en lo que se refiere al principio y a la habilitación del desplazamiento guiado— remite a prototipos fabricados de manera aislada en períodos anteriores a la Revolución Industrial, como probablemente ocurrió en la transición del Neolítico a la Edad de Bronce.¹ Pero lo cierto es que no fue sino hasta la década de 1830 que la marcha a vapor de las primeras locomotoras inglesas precipitó en la historia de los transportes una coyuntura de escala global que marcó el inicio de la era del ferrocarril: época centenaria agotada en el primer tercio del siglo XX y dominada por un ágil vehículo de arrastre que, de forma paralela a sus impactos producidos en materia económica, inevitablemente ha incidido —con su paso a ras de suelo— en la
reconfiguración de las realidades materiales y colectivas espacialmente localizadas.
El contenido de tal premisa aplicada a la historia ferroviaria de México cobra su cuota de valor en términos de un proceso planificado desde 1837 y apenas consumado en su primer objetivo nacional hasta 1873, año en el que la travesía practicada entre el Valle de México y el puerto de Veracruz se intensificó con el arranque de operaciones del primer servicio ferroviario de largo alcance fundado sobre la razón corporativa del Ferrocarril Mexicano. La activación de esa línea involucró, naturalmente, el acondicionamiento topográfico de una ruta de más de 420 km tendida sobre terrenos costeros, valles, serranías, barrancas, ríos y planicies; y a esto se sumó el montaje de estaciones, puentes, viaductos, alcantarillas, túneles y demás obras de arte. De ese modo se articuló todo un esquema de enlace terrestre que alteró los ejes de comunicación y transporte hasta entonces utilizados, y con ello se modificó también el sentido de ocupación, de accesibilidad y de percepción de los múltiples espacios por los que se hizo discurrir a esta primera vía férrea de cobertura interregional.²
Como detonador de estudio, lo antes comentado favorece el legítimo planteamiento
de un problema de naturaleza histórica, geográfica y sobre todo, de carácter regional. Y es que si bien es verdad que los compromisos de obra y operación ferroviaria de México se han supeditado al cruce nacional y renovable de estrategias políticas, económicas y empresariales, no es menos cierto que en dichas pautas coexisten, en su justa proporción, impulsos situados que se han posicionado como elementos activos frente a este desarrollo y a sus implicaciones, ya sea en razón de una postura coadyuvante, de aprovechamiento situado o de defensa del territorio.
ROBERTO ROMERO PEREZ DENISE SOARES Ana Cecilia Tomasini Ortiz GABRIELA MANTILLA MORALES ARMANDO RIVAS HERNANDEZ DANIEL MURILLO LICEA (2012, [Documento de trabajo])
El objetivo de este proyecto multianual ha sido brindar asistencia técnica y apoyar en la ejecución de dos proyectos piloto sobre tecnologías alternativas para el tratamiento de aguas residuales, en dos polígonos Hábitat de México; buscando así incentivar el uso de tecnologías alternativas para la dotación de agua potable y saneamiento en zonas carentes de estos servicios. En este informe se incluyen los resultados de la visita a 15 polígonos Hábitat, para la identificación de los sitios idóneos para el proyecto.
Tecnología apropiada Tratamiento de aguas residuales Saneamiento Zonas urbanas Areas de pobreza Informes de proyectos Morelos Puebla Querétaro CIENCIAS SOCIALES
Espacio, territorio y paisaje cultural en los estudios coloniales. Qué, para qué, cómo y hacia dónde
Marta Martín Gabaldón (2021, [Capítulo de libro])
Primera edición impresa: 2021. Primera edición electrónica en PDF con ISBN: 2022
Crédito eclesiástico y sistema de empréstitos de la catedral de Popayán, 1632 - 1790
Carolina Abadía Quintero (2022, [Artículo])
El presente artículo se centra en el estudio de 45 escrituras de censo del Fondo Notaría Primera del Archivo Central del Cauca, para identificar los créditos realizados por la catedral de Popayán entre los siglos XVII y XVIII, con el fin de analizar sus sistemas de empréstitos y de gestión económica, en cabeza del cabildo catedral. Se caracterizan entonces los tipos de censos, los valores y los réditos, así como los censualistas, los bienes y la geografía de los préstamos concedidos.
DANIELA BAQUEDANO FUENTES (2023, [Tesis de maestría])
La vida festiva y ceremonial en Tepoztlán, Morelos es parte importante del patrimonio cultural inmaterial de sus habitantes. Las festividades están vinculadas estrechamente con la religiosidad y el misticismo que caracteriza a la población; elementos inherentes a su identidad como tepoztecos. Aunado a esto, las fiestas tradicionales en Tepoztlán contribuyen a la creación de relaciones y vínculos sociales entre los habitantes que participan, siendo éstas un espacio que promueve la reciprocidad, expresada en el intercambio de sustento y trabajo, incluyendo a los alimentos. Sin duda, la fiesta es una ocasión de celebración representativa que favorece el despliegue de las relaciones y vínculos tanto a nivel familiar como con otras personas de la comunidad, siendo una oportunidad de encuentros y reencuentros, que sirven para consolidar la historicidad de los grupos. Además, la fiesta se considera un espacio de vinculación e interacción social y se caracteriza por ser una manifestación hecha en comunidad a través de la organización que permite la cohesión social y la formación de una identidad grupal, a nivel nacional, regional o local.
Así, tomamos como caso de estudio las fiestas tradicionales en Tepoztlán, Morelos, que han funcionado como integradores sociales, de pertenencia e identidad colectiva entre los habitantes. Cabe mencionar que, para la realización de estas festividades, es necesaria una organización comunitaria que se fundamenta en el tejido social de Tepoztlán, relacionado con la estructura de sus ocho barrios. Dicha organización y elección de las personas encargadas de las fiestas están asociadas con la distribución territorial de los barrios y la identidad colectiva que se enmarca en cada uno. De esta manera, la realización de las fiestas más importantes para la comunidad es un proceso que involucra una gran participación y compromiso por parte de los habitantes.
En este sentido, dicho proceso de la vida festiva en Tepoztlán, así como en otras comunidades, fue trastocado por la pandemia de Covid-19, principalmente por la gestión de la misma, reflejada en la implementación de las restricciones de desplazamiento, tales como el distanciamiento físico y el confinamiento, las cuales, aunque fueron temporales, han afectado la realización de las festividades desde la declaración de pandemia en 2020 hasta la fecha. Por lo tanto, nos enfocamos en estos momentos de integración social que son fomentados por el desarrollo de la vida festiva, y que, a raíz de dicha gestión de la actual pandemia, pudieron alterarse por la suspensión o modificación de la celebración de las festividades.
JULIAN ROBLES IBARRA (2020, [Tesis de maestría])
A lo largo del siglo XVIII, el llamado Septentrión Novohispano fue escenario de violencia casi permanente. Los conflictos y rebeliones indígenas que afectaron la región se incrementaron a partir de la segunda mitad de dicho siglo.
De los diversos grupos autóctonos que en esa época poblaban Sonora, los trashumantes seris fueron considerados entre los más problemáticos y belicosos por las autoridades hispanas. Las múltiples insurrecciones que protagonizaron fueron combatidas – en un principio – por las fuerzas militares disponibles en la región, es decir, tropas de presidio y milicias. Con el paso del tiempo, estos efectivos resultaron insuficientes para acabar de forma definitiva con la amenaza seri.
Para mediados del siglo XVIII, los seris o “comcaac” - como ellos mismos se denominan - lograron establecer una alianza con miembros de la etnia pima. Ambos grupos habían sido enemigos tradicionales por largo tiempo, sin embargo, con este entendimiento, los seris pudieron concentrar sus esfuerzos bélicos contra los pobladores y efectivos castrenses novohispanos presentes en la región.
Un elemento adicional que permitió el alzamiento armado de los seris y pimas, fue la ventaja estratégica que ofrecían las montañas que conformaban el llamado “Cerro Prieto”. En estas alturas, los sublevados encontraron refugio, alimento, agua y materiales necesarios para mantener su rebelión.
Esta situación llamó la atención de las autoridades hispanas quienes, en 1766, finalmente organizaron una expedición militar a gran escala como “escarmiento ejemplar”.
A partir del contexto anteriormente expuesto se plantea el tema de esta tesis. La idea central es el análisis de la campaña del “Cerro Prieto”, llevada a cabo entre los años 1767 a 1771, y organizada por las autoridades hispanas – en gran medida gracias al impulso del visitador don José de Gálvez – en contra de los sublevados seris y pimas refugiados en este macizo montañoso.
El planteamiento se hace desde la óptica teórica planteada en la llamada “Nueva historia militar”. En la introducción se explica cómo, tradicionalmente, la historia militar había centrado su interés en los aspectos relacionados con los grandes líderes, generales o gobernantes que habían dejado huella en el campo de batalla. Asimismo, por tradición, se estudiaba la relación entre estrategia, táctica, objetivos y resultados con una óptica “desde arriba”. La “nueva historia militar” propone, por el contrario, un acercamiento a lo social, a lo humano. Se plantea la idea de analizar los aspectos culturales, económicos, sanitarios, de sufrimiento, entre otros. Al mismo tiempo, se trata de “visibilizar” a los actores que habían sido secundarios en la historia militar tradicional: soldados y civiles.
El análisis de la campaña del “Cerro Prieto” no sería posible sin antes comprender el contexto regional e internacional que provocó su organización. De esto se da cuenta en el primer capítulo. Aquí se explica, de forma sucinta, los aspectos que tienen que ver con la “situación geopolítica imperante en la segunda mitad del siglo XVIII”. Por un lado, las preocupaciones españolas por proteger su “dilatado” imperio de la amenaza inglesa, pesaban fuerte en el ánimo y decisiones que se tomaban desde la corte de Madrid. Por otro lado, un aspecto que afectó el ánimo español fueron las desastrosas consecuencias que sufrió España al término de la “Guerra de los Siete Años”. Este conflicto europeo – en ocasiones calificado como una verdadera primera guerra mundial – involucró a los principales imperios continentales de la época, como Prusia e Inglaterra por un lado o Austria, Francia y España por el otro. Este conflicto afectó a dichos imperios y sus colonias. La pérdida de los territorios franceses en Canadá significó un desequilibrio en el balance de poder en América. En efecto, España se veía ahora, más que nunca, amenazada por la expansión inglesa desde el norte y desde el este de América. A esto se sumaba el impacto emocional y estratégico que significó para la Nueva España, la ocupación temporal de Cuba por parte de las tropas inglesas. Este hecho en particular evidenció la falta de preparación para la defensa de los territorios hispanos.
En este marco internacional se da la visita de un personaje que, con su voluntad e ímpetu, cambiaría muchos de los aspectos administrativos y militares de la Nueva España. Enviado especial del rey, con poderes extraordinarios, Don José de Gálvez será recordado, entre otras cosas, por ser el artífice en la implementación de las llamadas “Reformas Borbónicas” en Nueva España y ser el principal impulsor de la “Campaña del Cerro Prieto”. Esta campaña se planeó como respuesta definitiva al problema de la sublevación seri.
Mas adelante, en este mismo capítulo, se describe la sublevación seri y su intención de refugiarse en el “Cerro Prieto”. Escondidos en sus cañones y “escabrosidades” los indígenas sublevados se convirtieron en una amenaza interna que debía ser eliminada. Para poder enfrentar a un posible ataque británico, era necesaria la pacificación interna del septentrión novohispano.
CIENCIAS SOCIALES Rebeliones indígenas Historia militar Campañas militares Historia Siglo XVIII
Abraham Uribe Núñez (2024, [Tesis de doctorado])
En septiembre de 1876, el presidente municipal Manuel A. punto Ferrer, escribió una carta al presidente de México Sebastián Lerdo de Tejada, en la cual describió que en el pueblo minero de Real del Castillo habían campamentos reciente improvisados por algunos colonos mexicanos, estadounidenses y europeos, A diferencia de otras localidades del partido norte de baja California que estaban habitados por una diversidad de pueblos originarios y frontereños, un gentilicio adoptado por un conjunto de familias descendientes de los antiguos soldados misionales y algunos indios neófitos agrupados en los pueblos de misión fundados por la orden de los dominicanos en las postrimerías del siglo XVIII, pero poco antes del abandono de los frailes durante el fenecimiento de las misiones, la jura de la independencia y la secularización liberal e inicios del siglo XXI, asumieron El dominio territorial en esta demarcación que consolidaron con la instauración de ranchos que producían recursos limitados y provenientes de las ganaderías de libre pastoreo y agricultura en tierras de panllevar.
Frontera México-Estados Unidos -- Condiciones Sociales Baja California -- Condiciones Sociales -- Siglo XIX CIENCIAS SOCIALES HISTORIA HISTORIA
Víctor Eduardo Ramírez Márquez (2023, [Tesis de maestría])
"El objetivo de la presente investigación consiste en analizar las motivaciones que suscitaron la construcción de los siete templos con influencias arquitectónicas historicistas en la ciudad de Durango, desde las posiciones cambiantes entre
agencia y paciencia en que se situaron los actores religiosos que los promovieron, en el contexto de la contienda por el ejercicio de la libertad de culto, entre 1883 y 1908."
Iglesia Católica en Durango Templos -- Durango CIENCIAS SOCIALES HISTORIA HISTORIA
DANIELA BAQUEDANO FUENTES (2023, [Tesis de maestría])
La vida festiva y ceremonial en Tepoztlán, Morelos es parte importante del
patrimonio cultural inmaterial de sus habitantes. Las festividades están vinculadas
estrechamente con la religiosidad y el misticismo que caracteriza a la población; elementos
inherentes a su identidad como tepoztecos. Aunado a esto, las fiestas tradicionales en
Tepoztlán contribuyen a la creación de relaciones y vínculos sociales entre los habitantes que
participan, siendo éstas un espacio que promueve la reciprocidad, expresada en el
intercambio de sustento y trabajo, incluyendo a los alimentos. Sin duda, la fiesta es una
ocasión de celebración representativa que favorece el despliegue de las relaciones y vínculos
tanto a nivel familiar como con otras personas de la comunidad, siendo una oportunidad de
encuentros y reencuentros, que sirven para consolidar la historicidad de los grupos. Además,
la fiesta se considera un espacio de vinculación e interacción social y se caracteriza por ser
una manifestación hecha en comunidad a través de la organización que permite la cohesión
social y la formación de una identidad grupal, a nivel nacional, regional o local.
Así, tomamos como caso de estudio las fiestas tradicionales en Tepoztlán, Morelos,
que han funcionado como integradores sociales, de pertenencia e identidad colectiva entre
los habitantes. Cabe mencionar que, para la realización de estas festividades, es necesaria
una organización comunitaria que se fundamenta en el tejido social de Tepoztlán, relacionado
con la estructura de sus ocho barrios. Dicha organización y elección de las personas
encargadas de las fiestas están asociadas con la distribución territorial de los barrios y la
identidad colectiva que se enmarca en cada uno. De esta manera, la realización de las fiestas
más importantes para la comunidad es un proceso que involucra una gran participación y
compromiso por parte de los habitantes.
pandemia, pudieron alterarse por la suspensión o modificación de la celebración de las
festividades.
Por consiguiente, el presente trabajo de investigación se centra en analizar dos fiestas
tradicionales importantes para la cabecera municipal de Tepoztlán, Morelos: el Reto al
Tepozteco y el Carnaval, durante la pandemia de Covid-19. Con la finalidad de explicar el
impacto que han tenido los vínculos comunitarios de los pobladores de los distintos barrios
en Tepoztlán, Morelos a partir de la celebración de las fiestas tradicionales en el actual
contexto pandémico. El presente proyecto adquiere sentido en el marco de referencia
mencionado anteriormente pretendiendo ser una contribución al conocimiento sobre los
fenómenos sociales que ha dejado la actual emergencia sanitaria, es decir, la pandemia de
Covid-19. En este caso, desde la vida festiva en la comunidad; parte fundamental de su
identidad, patrimonio cultural inmaterial, que a su vez funciona como espacio de
cooperación, vinculación y de interacción social.
CRISTINA MEJIA TEJEDA (2023, [Tesis de doctorado])
Existen organismos internacionales y nacionales encargados de proteger el paisaje cultural¹ como la Organización de las
Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), considerando a los paisajes culturales testimonios
de la interacción entre el hombre y la naturaleza vinculada estrechamente con las formas tradicionales de producción, de
vida y creencias de los pueblos, de una manera compleja, es por esta razón que este organismo clasifica sus tipologías de
paisajes, destacando algunas de ellas como el Tongariro National Park, en Nueva Zelanda o el paisaje caribeño del Valle
de Viñales y el paisaje arqueológico de las plantaciones de café, en Cuba, y muchos más. La variedad de paisajes culturales
en el mundo es muy abundante, es por eso por lo que se encuentran dentro de una clasificación para su mejor comprensión
de acuerdo con las siguientes tipologías: el paisaje claramente definido, diseñado y creado intencionalmente por el
hombre, el paisaje orgánicamente evolutivo y el paisaje cultural asociativo (UNESCO, 2011,11).
De esta clasificación el que más concuerda con esta investigación es el Paisaje Cultural Asociativo, el cual se
define como aquel donde se confieren connotaciones religiosas, artísticas o culturales al componente natural, aún cuando
las evidencias materiales sean insignificantes o incluso inexistentes. Históricamente, los pueblos primitivos mantuvieron
una relación espiritual con la naturaleza que les rodeaba (UNESCO, 2011, p. 24).
Esta clasificación de Paisaje Cultural Asociativo es muy importante porque en la actualidad aún existen una gran cantidad
de pueblos nativos de Mesoamérica, mejor conocidos como los nahuas que tenían en común la lengua náhuatl, su cosmovisión
y religión. Estos grupos al momento de su fundación tomaban en cuenta su entorno natural con grandes significados
simbólicos que guardaba el paisaje, parte de estos significados eran fundamentales para comprender su origen y su cosmovisión
y sus asentamientos (altépetl²) lo situaban en la falda o al pie de las montañas reverenciadas o en las cercanías
de cuevas, manantiales sagrados, cañadas, barrancas, cauces de ríos y arroyos, que, de manera simbólica, son puntos de
contacto entre la superficie de la tierra y el inframundo – concepción cosmogónica prehispánica que logró trascender al
mundo novohispano– de esta manera ocupaban esa porción territorial llamada paisaje donde se pueden leer los rasgos
aportados por la naturaleza del lugar como las acciones y actividades que las sociedades imprimen en ella, así lo menciona
Fernández Chistlieb y García Zambrano, 2006, pp.16-20.